El violín tal como lo conocemos ahora pudo empezar a fabricarse en Brescia o Cremona en el siglo XVI, no se sabe con certeza cual de las dos ciudades empezó a fabricarlos antes. En el caso de que fuese la segunda se atribuye el invento a Andrea Amati, un constructor de laudes que comenzó a fabricar violines en la ciudad de Cremona por orden de la familia Medici. El más antiguo que se conserva actualmente es un modelo del propio Amati llamado Charles IX, hecho en Cremona en 1564.
Fue una variación de otros instrumentos anteriores como la viola da braccio y la lira da braccio, ambos instrumentos italianos que descenderían a su vez de instrumentos de arco anteriores inventados en el mundo islámico y bizantino como el rabab o la lira bizantina que se comenzaron a extender por Europa en los siglos XI y XII.
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