Antes de las monedas tal como las conocemos ahora ya se habían utilizado varios instrumentos para intercambiar productos como collares, figuras o piezas de metal. Las monedas como las conocemos ahora se empezaron a fabricar hace 2.600 años en la región de Lidia, región que ahora pertenece a la actual Turquía aunque por entonces pertenecía al mundo griego, estaban hechas de una aleación temprana de oro y plata llamada electrum, estas portaban grabadas un león que representaba la familia de los reyes de Lidia de la Dinastía Mermnada. Sin embargo la moneda más antigua con inscripción se ha encontrado en Caria, una región próxima a Lidia, la cual porta la inscripción "phaenos emi sema" que se traduce como "Yo soy la insignia de Fanes" o bien "Yo soy el signo de la luz". A partir de ahí se fue extendiendo su uso a otras civilizaciones como el Imperio Aquémenida persa en el siglo VI a.C, en China se empezaron a utilizar en el siglo IV a.C. y en Roma en el siglo III a.C.
Fue inventada por el chino Bi Sheng aproximadamente en el año 1041 durante la dinastía Shong y la hizo con porcelana china. Los tipos móviles estaban hechos a base de arcilla cocida que ponía sobre una placa de hierro. En Corea se utilizaron durante la dinastía Goryeo a principios del siglo XIII los tipos metálicos, también en este siglo XIII se empezaron a hacer los tipos de madera en China y a finales del siglo XV las clases altas utilizaron el bronce. En Europa se inventó independientemente del invento chino la imprenta de tipos móviles por Johannes Guttenberg a mediados del siglo XV, su primer libro fue una biblia escrita en latín impreso en 1552 aproximadamente en la ciudad de Maguncia (Mainz), esta se popularizó rápidamente al resto de Europa y fue mucho más fácil de utilizar gracias a que el alfabeto latino tenía muchos menos caracteres que los de la escritura china.
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